Te has preguntado ¿Por qué se te dificulta tanto superar alguna ruptura de pareja? O ¿Por qué continuas en relaciones que no te agradan?, ¿Por qué terminas una relación y de inmediato inicias otra? O quizá te importa mucho la opinión de los demás. Si piensas que podrías ser una persona dependiente, aquí te comentamos cuáles son las características de dicha personalidad.
La personalidad dependiente se caracteriza por la necesidad excesiva de que alguna persona se ocupe de él o ella, dicha necesidad se va a relacionar con comportamientos de sumisión, apego y con temor frecuente a la separación, lo cual puede generar en la persona dependiente la creencia de que es incapaz de funcionar adecuadamente sin la ayuda de los demás (Gutiérrez y Silva, 2019).
Son personas que creen que no existen sin el otro porque no tienen una vida íntima e individual y esto los lleva a mantener relaciones simbióticas (Cubas, 2004).
De acuerdo a la APA (2013) el trastorno de personalidad dependiente se caracteriza por lo siguiente:
• Les cuesta tomar decisiones de la vida cotidiana sin el consejo y la validez de otras personas.
• Necesitan a los demás para asumir responsabilidades en la mayoría de los ámbitos importantes de su vida.
• Presentan dificultad para expresar desacuerdos por miedo a perder la aprobación y el apoyo de los demás.
• Tienen problemas para iniciar proyectos o hacer cosas por sí mismos.
• Hacen cosas que les desagradan para obtener aceptación y apoyo de los demás.
• Se sienten incómodos o indefensos cuando están solos por un miedo excesivo de ser incapaz de cuidarse a sí mismo.
• Cuando terminan una relación estrecha, buscan con urgencia otra relación para que los cuiden y los apoyen.
• Sienten una preocupación no realista por miedo a que los abandonen y tengan que cuidar de sí mismo.
También las personas dependientes se caracterizan por tener pensamientos pesimistas y presentar inseguridad en sí mismos, ya que se perciben como inadecuados y desvalidos, incapaces de mostrarse exitosos frente al mundo.
Son personas que minimizan sus capacidades y valores, muestran muchas expectativas sobre los demás y sobre ellos mismos, lo cual hace que se relacionen en función de cómo desean que sean las otras personas y no en función de como son realmente, lo cual las lleva a ser inflexibles en áreas de comunicación, expresión afectiva y en la resolución de problemas.
Pueden interpretar la crítica y la desaprobación como pruebas de su inutilidad, lo cual puede afectar su autoeficacia.
La felicidad la ven como algo externo y es cuando buscan a alguien que las cuide y las proteja, se aíslan de grupos de apoyo y sucírculo es limitado, además la personalidad dependiente se relaciona con estado de ánimo depresivo, ansioso e irritabilidad.
Tal vez cuentes con algunas de estas características, aunque si notas que te identificas con la mayoría y eso te está causando problemas en diferentes áreas de tu vida puedes acercarte con algún profesional que pueda apoyarte.