Las personas con Trastorno Límite de la Personalidad (TLP) son muy sensibles a las circunstancias ambientales, debido a que el TLP tiene un aspecto biológico importante. En estas personas, el sistema límbico que regula las emociones se activa con mucha facilidad y la región del cerebro que controla los impulsos, es decir, la corteza prefrontal se activa poco por lo que reaccionan intensamente a muchas situaciones y les es difícil controlarlo.
Es ahí donde se origina mucho de los conflictos con la familia y los cercanos de la persona con TLP, ya que la persona reacciona ante situaciones que aparentemente son irrelevante para los demás, por lo que resultan incomprensibles y desproporcionadas, pero para la persona con TLP no resulta en absoluto desproporcionada y además es difícil de controlar.
Entonces, ¿qué es lo que puedo hacer para apoyar a mi familiar? A continuación te compartimos algunas recomendaciones:
• Infórmate sobre el trastorno de fuentes confiables
Este es el primer punto y seguramente el más importante, ya que al conocer cuáles son las características del trastorno, qué implica y cómo se trata,será más sencillo entender por qué tu familiar hace lo que hace y qué necesita.
También te ayudará a tener apertura para entender que no lo está haciendo a propósito y que tampoco es tu culpa. Esta es una de las creencias que más se presentan en las personas que conviven con alguien que vive con TLP y es comprensible.
Sin embargo, cuando conoces que el trastorno tiene un aspecto biológico importante, que implica un gran malestar para tu familiar y que las conductas que tiene son al final estrategias para lidiar con ese malestar, puedes afrontar la situación desde la aceptación y la bondad y no desde el castigo y la lucha constate.
• Acepta el trastorno de tu familiar
Importante mencionar que aceptar no implica que te guste lo que pasa con tu familiar, que no te importa o que lo tengas que “aguantar”. Esto quiere decir que no te pelees con el trastorno, no intentes controlar los síntomas de tu familiary no trates deconvencerlo de que la forma en que piensa, siente y actúa no es adecuada. En su lugar, usa esa energía para relacionarte de una forma diferente con tu familiar que funcione para tener una relación satisfactoria.
• Evita responsabilizarte o culparte por las acciones de tu familiar
El comportamiento de cualquier persona es autónoma, incluyendo el de tu familiar, por lo que sus acciones son decisión de tu familiar. El trastorno no lo exime de su responsabilidad y tampoco lo incapacita para tomar decisiones, por lo que no intentes resolverlos tú. Puedes aconsejar sobre cómo crees que él puede resolver sus problemas, pero recuerda que al final quien tomará la decisión y las acciones necesarias deberá ser tu familiar.
• Escucha y valida las emociones de tu familiar
Recuerda que tu familiar reaccionara con mucha intensidad ante cosas que para ti puede que no tengan sentido, pero para tu familiar sí que lo tiene y además le es difícil regularlo.
Escucha de forma activa lo que dice tu familiar, sin juzgar ni rechazar lo que dice, no lo interrumpas y no intentes proponerle soluciones. Pon toda tu atención en lo que te dice, para que puedas identificar qué emoción está experimentando y qué lo ocasionó. Esto te ayudará a validar su emoción.
Validar se refiere a comunicarle a mi familiar que su emoción tiene sentido y es entendible según la forma en que ve el mundo. Esto quiere decir que todas la emociones que tiene tu familiar y tú, son siempre válidas y tienen sentido. No necesitas estar de acuerdo con su emoción, basta con que identifiques qué está sintiendo y qué situación lo detonó.
• Comunícate de forma asertiva
Es normal sentirse molesto o agraviado con algunas de las conductas de nuestro familiar. Sin embargo, antes de comunicarnos con nuestro familiar necesitamos estar tranquilos para poder expresar lo que sentimos. Te puede servir aprender estrategias de relajación como la respiración diafragmática.
Comunicarnos de forma asertiva implica poder decir lo que pensamos, deseamos y sentimos de forma honesta y concreta, sin transgredir los derechos de la otra persona. Inicia describiendo la situación (sin interpretaciones), expresa lo que sientes y piensas usando la palabra “yo” y finaliza con lo que deseas que cambie o se haga ante la situación. Evita reprochar o interpretar las razones de tu familiar para actuar como lo hace.
• Establece acuerdos en cuanto a los límites en la relación
Las personas con TLP tiene problemas para identificar los límites en las relaciones, por lo que no temas en marcarlos de forma asertiva. Expresa de forma clara y abierta las conductas que no son tolerables a pesar de la emoción que esté experimentando (insultos, golpes, gritos, etc.) y llegar a acuerdos sobre cómo comunicarse cuando se siente superado por sus emociones, los momentos para estar juntos y los momentos para tener actividades en individual. Evita usar las amenazas o los ultimátum con tu familiar.
• Cuida tu salud física y mental
Mantén tus actividades individuales y evita cerrar tu vida en torno a tu familiar. Es importante que cuides tu sueño, alimentación, recreación y la salud física en general. Además es muy recomendable que asistas a grupos de apoyo para familiares de pacientes con TLP o a psicoterapia, donde podrás aprender habilidades para gestionar el estrés, regular tus emociones y comunicarse de forma asertiva. Recuerda que para cuidar de tu familiar, primero debes cuidar de ti.