Cuando se alcanza la abstinencia (suspensión del consumo de sustancias) tras haber recibido un tratamiento o no, la tarea primordial es mantenerse sin consumo, lo que implica mucho esfuerzo y una serie de herramientas personales para lograrlo. Conocer son los factores principales que componen a la recaída es primordial, ya que permite identificar aspectos personales en los que hay que poner atención para trabajar en ellos y evitar la recaída, ya que esta es un proceso gradual y entre más rápido se aborde, es más favorable.
Recaída emocional
Durante la recaída emocional, las personas no piensan en consumir. Recuerdan su última recaída y no quieren repetirla. Pero sus emociones y comportamientos los están preparando para una recaída en el futuro. Debido a que no están pensando conscientemente en consumir durante esta etapa, la negación es una gran parte de la recaída emocional.
Estos son algunos de los signos de una recaída emocional:
1) Reprimir las emociones;
2) Aislarse;
3) No asistir a las reuniones;
4) Ir a reuniones pero no compartir;
5) centrarse en los demás (centrarse en los problemas de otras personas o centrarse en cómo otras personas les afectan);
6) Malos hábitos alimenticios y de sueño. El denominador común de la recaída emocional es un autocuidado deficiente, en el que el autocuidado se define de manera amplia para incluir el cuidado emocional, psicológico y físico.
Recaída cognitiva
En la recaída cognitiva, hay una guerra dentro de la mente de las personas. Parte de ellos quiere usar, pero parte de ellos no. A medida que los individuos profundizan en la recaída cognitiva, su resistencia mental a la recaída disminuye y aumenta su necesidad de escapar.
Estos son algunos de los signos de una recaída cognitiva:
1) Ansias de consumir drogas o alcohol;
2) Pensar en personas, lugares y cosas asociadas con el uso pasado;
3) Minimizar las consecuencias del uso pasado o hacer más atractivo el uso pasado;
4) Negociación;
5) Mentir;
6) Pensar en esquemas para controlar mejor el uso;
7) Buscar oportunidades de recaída;
8) y planificar una recaída.
Recaída física
Finalmente, la recaída física es cuando una persona comienza a consumir nuevamente. Algunas veces se divide la recaída física en una "caída" (el consumo inicial de bebidas o drogas) y una "recaída" (un regreso al consumo incontrolado). Una vez que una persona ha tomado una bebida o ha consumido una droga, esto puede llevar rápidamente a una recaída del consumo incontrolado. Pero lo que es más importante, por lo general conducirá a una recaída cognitiva de pensamientos obsesivos o incontrolados sobre el consumo, que eventualmente puede conducir a una recaída física.
La mayoría de las recaídas físicas son recaídas de oportunidades. Ocurren cuando la persona tiene una ventana en la que siente que no quedará atrapada. Parte de la prevención de recaídas implica ensayar estas situaciones y desarrollar estrategias de salida saludables.
Cuando las personas no comprenden la prevención de recaídas, piensan que implica decir que no justo antes de que estén a punto de consumir. Pero esa es la etapa final y más difícil de detener, razón por la cual la gente recae. Si un individuo permanece en una recaída mental el tiempo suficiente sin las habilidades de afrontamiento necesarias, es más probable que recurra a las drogas o al alcohol solo para escapar de su confusión. Por lo tanto es importante continuar con el acompañamiento psicológico y psiquiátrico a pesar de haber llegado a la abstinencia, ya que esa es solo la primera parte del trabajo.